22 oct 2011

A British comeback

Hace tiempo que llevo dándole vueltas a la cabeza a retomar este blog, que lo tengo bastante abandonado, pero no ha sido hasta esta mañana cuando una señal directa del cielo me ha abierto los ojos para indicarme el momento: espoilertv no va. Ya es hora de que me desenganche de las series anglo (hasta que vuelva a funcionar mañana, quizás?) y me concentre en otros vicios más útiles para el desarrollo del alma.


Qué mejor forma de volver a britofilia que con el producto más identificativo de la cocina británica? Sí, el fish&chips. Una institución en toda regla. La cumbre de la fast food si está hecho en condiciones e incluso un buen plato principal si se sirve en un restaurante, con tostadas untadas de mantequilla y té, por supuesto. No es más que un pescado blanco rebozado (merluza, bacalao, platija o cualquier derivado) acompañado de patatas fritas, pero claro, como todo tiene su ciencia y su receta secreta para el rebozado perfecto.

Un auténtico fish&chips se tiene que hacer frito en pringue de la buena, que chorree, y las patatas han de tener un corte grueso. Y nada de ketchup o mayonesa, sólo sal y vinagre, suficiente para que te escuezan los labios cortados por el frío – mi acompañamiento favorito para las patatas desde que me acostumbré al agrio suave del vinagre de malta–.

Eso sí, conscientes de la fama internacional de poco saludable que tiene la cocina británica, no ha faltado quien se ha puesto a ingeniar la forma de rebajar la cantidad de grasa del fish&chips, como asar las patatas en vez de freírlas (aún no lo he visto en un chippy –local que vende fish&ships–) o cambiar la tradicional manteca de freír por aceite vegetal entre otras alternativas...

Además del tipo y frescura del pescado, el rebozado juega un papel fundamental en la calidad final del fish&chips, con huevo o cerveza o ale. Y las patatas han de ser harinosas, tipo King Edward o Maris Piper. Y por supuesto, el acompañamiento estrella, los mushy peas, una buena forma de destrozar guisantes.

NB: en el restaurante antes citado, dos amigos ingleses del Sur se quejaron de que el rebozado no era muy auténtico y que the whole thing era un producto congelado. Yo no sé si era cierto, o un capítulo más de las diferencias Norte-Sur en este país, pero eso sí, el de la foto que compré en un puesto del Northern Quarter en Manchester me gustó más...

10 jul 2011

Gracias y adiós



Así se despide para siempre el periódico dominical (bueno, el tabloide dominical) más vendido de Reino Unido, News of the World (NOTW). En su página 3, en lugar de la tradicional chica semidesnuda, un editorial que, aunque nada humilde, sí pide perdón por el escándalo de los teléfonos pinchados. Una vez expiado el pecado esperan que "la historia acabará por juzgarlos", como diría un presidente de gobierno con delirios de grandeza.

NOTW pide perdón asegurando que han llegado a estas malas prácticas de la mano de unos pocos que han trabajado para ellos o en su nombre, y que han perdido los estándares de calidad que antaño demandaban. Eso sí, sólo ahora y "muy dolorosamente" se han dado cuenta de que desde 2006 esos "pocos otros" pincharon teléfonos para obtener exclusivas, una práctica "vergonzosa" e "injustificable". Desde luego en esta ocasión sí que han hecho historia, como asegura el titular del editorial.

Por lo demás, se erigen en defensores de los derechos de los niños, la lucha contra los pedófilos y la libertad de prensa, además de asegurar que NOTW se ha convertido en algo tan indispensable un domingo en este país como el tradicional asado.

¿Y qué puede llevar al magnate Rupert Murdoch a cerrar una de las publicaciones insignia de su grupo News International? ¿Por qué un hombre capaz de hundir países jugando con la moneda y de aupar gobiernos a través de la influencia de sus medios se echa para atrás y cierra NOTW? Primero porque casi nadie quería pagar por anunciarse en el tabloide y sin publicidad un periódico no se sustenta. Pero desde mi punto de vista pesan más en su decisión las peticiones laboristas de que el gobierno no permita a Murdoch controlar la totalidad de BSkyB –la plataforma de televisión de pago más importante de Reino Unido y de la que ya posee el 39%– hasta que no se resuelva judicialmente el escándalo de las escuchas. De momento, Murdoch ha movido ficha.... ¿cómo acabará el culebrón? Al menos, no publicado en NOTW...

19 may 2011

Pete Doherty before jail

Un año y pico en Manchester y he disfrutado de muchos menos conciertos de los que me hubiera gustado. Y no ha sido por oportunidades, si por algo se conoce a la capital del norte además de por el fútbol es por la cantidad de bandas que ha parido. Puedo empezar una lista, desde Oasis a Elbow pasando por The Ting Tings... pero sería muy larga para hacerla de memoria. También he de reconocer que a veces dejo escapar las oportunidades. Por ejemplo, Arcade Fire ha estado ya un par de veces por la ciudad –aunque volverán antes de que acabe el año– y cuando me he querido enterar ya estaban las entradas agotadas...

Queda comprobado entonces que si me pierdo conciertos es porque no sé organizarme. Vale, golpe número uno encajado, con fácil solución. Golpe número dos: no siempre tengo con quién ir, así que tendré que buscar más amigos. Golpe número tres: una vez quise ir a ver a The Wombats y cancelaron el concierto. Vale, eso ya es Murphy en persona dando por culo.

A veces Murphy se acuerda de mí para bien, como aquella vez que fui a ver a la hija de Sting y otros en un concierto gratuito organizado por Spotify –sí, Spotify y música gratis fueron sinónimos durante un tiempo feliz–, o justo ayer, cuando de pronto, surgidas de la nada, mi housemate aparece con dos entradas para ver a Pete(r) Doherty en directo.



Estuve toda la noche bromeando sobre si éste iba a ser el último concierto de Doherty antes de que muriera de sobredosis o lo metieran en la cárcel de por vida... Bueno, hoy ha sido condenado a seis meses de prisión por posesión de cocaína... No digo más.

14 may 2011

Compromiso


Escribo mientras escucho Whatever People Say I am, That's What I'm Not de Arctic Monkeys, acabo de tomarme un té y esta mañana me he metido un full English –o casi– entre pecho y espalda. Digo antes sorry que perdón si me tropiezo con alguien en la calle, salgo en mangas cortas aunque haga 7 grados y he pasado una semana en Sicilia representando a UK en un encuentro de jóvenes europeos.

A pesar de todos estos hechos veraces y comprobables, mi compromiso democrático está con mi terruño. Al menos mientras no esté empadronado en Manchester. Por primera vez en mi vida voy a votar por correo en unas elecciones locales; no voy a perder la oportunidad de aportar mi granito de arena en la manera en que quiero que se gobierne mi ciudad natal, regrese cuando regrese –y si regreso–.

El sobrecito con la papeleta ya debe estar en el avión camino de la mesa electoral, con la efigie dorada de Queen Liz estampada en tamaño XXL. Cinco libras para certificar un voto bien gastadas, que aunque vayan a ser reembolsadas después poco me importaría perder por tal de ejercer mi derecho y deber como ciudadano. Por cierto, ciudadano nazareno, para más inri.

13 abr 2011

A veinte metros


La realidad te da de lleno cuando menos te lo esperas. A veinte metros de mi casa, por donde paso todos los días para coger el autobús, una calle tranquila pero transitada amanecía acordonada por la policía.

En mi estupor matutino y sin café en el cuerpo, adocenado por la falta de asombro y la pérdida constante del interés periodístico, sólo acerté a asentir con la cabeza mientras le decía al policía al otro lado del cordón "tengo que coger por la otra calle, ¿verdad?". No es que una calle cortada con furgones a ambos lados no sea llamativo, quizás es que estaba más interesado en no llegar tarde al trabajo.

Una hora después, mi teléfono vibra con un mensaje de mi compañera de casa: Ha habido un incendio, han muerto una mujer mayor y un hombr xlo visto. Xeso staba la caye cortada, han vnido ahora a xlos cuerpos. Mi asombro es máximo. No esperaba más que una detención de algún delincuente común, pero, ¿un incendio?... No se veían restos de las llamas desde la calle, ni siquiera olía a quemado, con lo sensible que yo soy para los olores... Al comentarlo en la oficina me responden que la noticia es portada en el periódico, también aparece en la web de la BBC. Sí, ésa es la calle, por ahí paso todos los días, pero no me he enterado de nada, porque un mal resfriado me tiene 24 horas en la cama apollardado!!!

Leyendo descubro que el incendio parece haber sido provocado para enmascarar un asesinato. Un bombero, alertado por alguien que pasaba por allí ayer sobre las 2pm, descubrió al apagar las llamas el cuerpo de una mujer de 47 años, herida de muerte en el cuello. Enseguida pongo al tanto a mi compañera de casa, que me responde: Pues sto s duna periodista q me he ncontrao xla calle, ni idea xo a kmado no olí dsd luego. La tía sta ha dixo qla mujer xlo visto murio ants dl "fuego". N cuanto yge al trabajo lo miro x internet. Q fuert.

Al parecer, la madre de la fallecida vive sólo dos puertas más abajo. En la ventana del saloncito que da a la calle, sigue como testigo mudo un cartel que llamaba mi atención todas las mañanas:
La policía israelí llama a esto defensa propia, sobre la foto de un policía maltratando a una mujer presumiblemente palestina.

Enlace a la noticia (en inglés)

4 abr 2011

Mi mamá me mima

En UK el día de la madre se celebra el cuarto domingo de cuaresma, osea, ayer. Ya daba un poco de grima ver tantas flores, corazones y mummys-I-love-you en los supermercados, puestos callejeros y anuncios de periódico.

A pesar de que sea una excusa más para aumentar las cuentas de resultado de grandes y pequeños negocios, al fin y al cabo todos queremos a nuestras madres. Especialmente debe de querer a la suya James Warren, un chaval de 19 años en paro que ha recibido de manos de su progenitora unas 10,000 libras (12.600 euros) en ropa, viajes y caprichos en el último mes y medio.


La mamma —se llama Ornella y sí, es de origen italiano— asegura que no lo está haciendo un niño mimado, sino que al comprarle trajes de Armani consigue aumentar su autoestima porque el chaval es tímido. Claro, tan tímido que no es capaz de decirle que se va a un club de striptease con los amigos y por eso le insiste al teléfono que va a la biblioteca...



Parece que James se ha cansado de que su madre le reviente los granos y le sirva de vez en cuando la comida en la cama. Calcula que en el último año se ha gastado en él
20,000 libras de su paga de jubilación. Por eso, para devolverle tanto cariño consumista, ayer se gastó en regalos para su madre toda su paga del paro. Unas 52 libras.


20 mar 2011

Una morcilla con éxito

Cada pueblo tiene su especialidad gastronómica, y a pesar de que en la cocina británica estén muy presentes los currys, es posible encontrar señas de identidad más allá del chicken tikka masala y el fish and chips. Un buen English breakfast no estaría completo sin el black pudding, el equivalente británico a la morcilla de Burgos. Y para black pudding, el de Bury, una pequeña ciudad a unos 25 minutos de Manchester.

Hace nueve años, Debbie Pierce, tendera del mercado local que llevaba toda la vida vendiendo black puddings los sábados, decidió fundar su propia empresa de morcillas después de quedarse con el puesto y de que su marido heredara la fábrica y la receta secreta de 100 años de antigüedad. Bajo el nombre tan poco original de Bury Black Pudding Company, comenzó a expandir el negocio por tiendas locales y poco a poco las grandes cadenas nacionales de supermercados se interesaron por el producto. Incluso dicen que se vende en los superexclusivos Harrods de Londres.

El cuento de la lechera, en este caso de la tendera convertida a empresaria, es una historia de éxito, especialmente desde que la fábrica se trasladó a Bury, donde no se producía desde los años cincuenta. De esta forma la empresa de Debbie se ha convertido en la única que fabrica la famosa morcilla en el lugar que le da nombre. Y se le da bastante bien; en 2010 salieron de la Bury Black Pudding Company 38 toneladas de morcilla a la semana, que a unas 90 pence por pieza resultaron en 2,7 millones de libras (unos tres millones de euros) de facturación.

Pero... ¿de qué está hecha esta morcilla? Pues como todas, de sangre de cerdo, mezclada con tacos de grasa, avena y especias. Aquí va una colección de recetas si la idea de comerla en el desayuno no acaba de resultar convincente. Yo la uso en el potaje de garbanzos, aunque donde esté una buena morcilla ibérica, que se quite lo demás.

18 mar 2011

Red Nose Day

Los telemaratones están pasados de moda. En Reino Unido, donde la vanguardia convive con la tradición más añeja como símbolo de identidad nacional, no. Al menos no el telemaratón del Red Nose Day (Día de la nariz roja), emitido por la BBC desde 1988 y cuya recaudación Comic Relief destina a proyectos para la infancia. Las estrellas del momento y el famoseo nacional se afanan en participar en la gala televisiva y en toda la campaña publicitaria que la acompaña durante semanas.

La participación de la sociedad británica llega más allá del sofá y el mando de la tele. En ciertos supermercados y cadenas de ropa se venden prendas y libros creados para la ocasión, y por supuesto las características narices rojas que cada año cambian su diseño con cara de pequeños monstruos. El periódico gratuito METRO ha publicado durante toda la semana una sección especial para recordar el evento y dar a conocer la labor de la ONG y el destino de los fondos recaudados.

Pero más allá de los medios de comunicación y las cadenas de venta, las empresas organizan entre sus empleados su propia recaudación de fondos. La web del evento daba pistas y consejos, que bajo el lema "Do something funny for money" incluían desde recaudar fondos para ir a trabajar en pijama, vender porciones de pastel o llevar a cabo algún tipo de atrevimiento si se recauda cierta cantidad.

En mi empeño por integrarme en la sociedad británica, me propuse participar de pleno en el Red Nose Day, sugiriendo teñirme el pelo de rojo si conseguíamos más de 200 libras. La bola de nieve fue creciendo, y la propuesta incluía teñir pelo y barba por 250 y alguna otra parte de mi cuerpo si se rebasaba la cantidad. Tras un primer día de recaudación algo flojo, hoy viernes la cifra ha ido vertiginosamente en aumento, hasta el punto de que la próxima semana -y lo que me dure el tinte-, seré pelirrojo...